Hace ya casi tres años
iniciamos en Palencia un proyecto llamado Laboratorio Experimental
de Erotismo. Lo hicimos para posibilitar el acceso a experiencias
eróticas a personas que por circunstancias particulares no supieran
como solucionar una necesidad tan evidente y tan indispensable para
el equilibrio emocional. El erotismo es un impulso que nace de lo más
instintivo del ser humano y tiene mucho que ver con la necesidad
afectiva. Sin embargo las ofertas eróticas que más se prodigan son
las del comercio sexual, totalmente deshumanizado y desprovisto de
componentes afectivos. La necesidad erótica de la población es algo
evidente, a la vista del éxito de las miles de webs que ofertan
sexo para mirar, páginas de contactos, prostitución….
Existen razones para
pensar que la vida erótica de las personas que nos rodean, tengan o
no pareja, es bastante mejorable. La rutina y el desgaste de los
años acaban minando las relaciones, y en consecuencia podemos
refugiarnos en un mundo de fantasías irrealizables, o en una vida
erótica paralela y clandestina. Nosotros ofrecemos un espacio para
encuentros de personas que no están satisfechas con su vida erótica
y que desean encontrar alternativas que no les impliquen sentimientos
de sospecha, engaño o culpabilidad. Nuestro proyecto posibilita
desde hace casi tres años encuentros eróticos de gran calidad
humana, en los que la ternura, la afectividad y el respeto a la
voluntad de cada persona son lo principal.
Nuestras actividades
tienen lugar en un centro que oferta cursos y talleres de crecimiento
personal y salud, básicamente. En la sala de actividades nos solemos
reunir una vez al mes un grupo de participantes (algunos acuden por
primera vez, otros son habituales) para explorar nuestras capacidades
eróticas y averiguar cuál es nuestra relación con nuestro cuerpo
erótico, y para saber si esa relación es mejorable. Nos servimos de
juegos y ejercicios que tienen que ver con los sentidos. Nos hemos
concedido un tiempo para averiguar cuáles son los códigos que
queremos utilizar. Actualmente admitimos que no hay gestos eróticos
“legales” o “ilegales”, y que todo el mundo tiene la
libertad para pedir, dar, desear y vivir su erótica conforme a su
voluntad. Creemos que las necesidades eróticas no deben reprimirse,
esconderse, camuflarse, ni nos deben crear sentimiento de suciedad,
vergüenza, culpabilidad o sospecha. Cada persona debe disponer y
decidir sobre su propio cuerpo, es una condición indispensable que
implica una nueva visión de las relaciones eróticas. Llegará el
día en el que todas las personas que han estado participando en uno
de nuestros talleres, sientan, una vez éste haya terminado, la misma
sensación de tranquilidad y naturalidad que si hubieran asistido a
unas clases de yoga, pilates, tai-chi,….Nosotros queremos colaborar
para que ese día llegue cuanto antes y para que la sociedad vaya
despenalizando las “cosas del cuerpo”.
En nuestro espacio de
experimentación compartimos abrazos, miradas, caricias, palabras,
gestos, ternura, afecto, generosidad, sin robarle nada a nadie y sin
daños colaterales, intentamos sentirnos personas libres viviendo
nuestra erótica según nuestro gusto y necesidad. Intentamos que
ello sea posible en nuestro Laboratorio Experimental de Erotismo,
en Palencia.